La exposición Umbrales– Auf der Schwelle trata sobre el cambio, la incertidumbre y la fragilidad en que se encuentran nuestras sociedades en tiempos de crisis complejas y globales. Estar en el umbral significa vivir en un estado intermedio, en lo incierto, lo desconocido y lo inconsciente, pero también en un momento de transformación. Además de la dinámica del cambio, el término umbral indica la posibilidad de una realización: las palabras latinas limen (umbral, frontera) y lumen (luz) fluyen juntas, una frontera que abre paso hacia la luz, hacia la consciencia.

En el mes de octubre de 2019, se produjo en Chile una ola de protestas contra las políticas del gobierno. Las profundas crisis sociales y ecológicas del país, que están estrechamente conectadas, se pusieron en la palestra. Producto de las protestas, el gobierno convocó un plebiscito nacional. Con una aprobación del 80%, el pueblo chileno decidió reemplazar la actual Carta Magna, que data de los tiempos de la dictadura de Pinochet, y escribir una nueva Constitución a través de un proceso conjunto. La Convención Constitucional está compuesta por 155 personas, quienes fueron elegidas por medio de elecciones democráticas. Así, por primera vez en la historia de Chile, se establecieron criterios como paridad de género y un número fijo de representantes de los pueblos originarios. El país se encuentra actualmente en un significativo pero también frágil momento – en el umbral. 

¿Qué aspecto tiene un orden social que busca respuestas a los tiempos en que vivimos? Las preguntas sobre una sensibilidad ecológica, el reconocimiento de una diversidad cultural y lingüística, la igualdad de género y la configuración tecnológica de nuestro entorno vital no sólo son relevantes en Chile. En general, estas interrogantes señalan puntos de conexión para una reorganización de nuestras diferentes sociedades.

¿Cómo anudar el tiempo? – plantea la pregunta de cómo nos relacionamos, orientamos y conectamos en el espacio y tiempo. Las obras artísticas parten de diferentes momentos umbrales: de las protestas en las calles de Chile, de personas y paisajes extenuados por la explotación y la industrialización, de ruinas y vestigios de un mundo modernizado y acelerado. Mediante observaciones atentas, narraciones y rastros materiales, las obras nos acercan a la comprensión de estas situaciones. En el centro de las obras se plasma una conciencia colectiva que hace tangible la interconexión de la vida. A partir de estos nudos simbióticos, las obras exploran una variedad de posibilidades de puesta en contacto mediante el lenguaje humano, pero especialmente más allá de él. En este contexto, se entrelazan diferentes formas de conocimiento, así como tecnologías antiguas y nuevas, que nos abren nuevas comprensiones respecto a nuestras vidas.

¿Qué códigos, qué nudos se entretejen al entramado social de nuestro tiempo? ¿Cómo pueden el arte y la cultura ayudarnos a comprender mejor el impacto de nuestras acciones en el frágil ecosistema en el que vivimos? La exposición representa una invitación a agudizar nuestros sentidos y sensibilidades en una época de incertidumbre: observar con atención, escuchar y sentir, pero también soñar, imaginar y recordar, para atravesar colectivamente el umbral hacia otro tiempo en el que nos consideremos parte de una compleja constelación de relaciones interdependientes.

Este proceso abierto de reunir fragmentos, observaciones, pensamientos, discusiones y exploraciones en conjunto continúa en el espacio digital como una cámara de eco. En www.constelaciones.xyz se pueden encontrar más fragmentos de las obras artísticas que siempre vuelven a conectar con el programa de Umbrales y producen más capas de significado.