«Ejercicios de aridez» es un proyecto polimorfo que fija su atención sobre la imagen de un inquietante cuchillo corvo de 2 kilómetros de extensión, dibujado minuciosamente con cal sobre el suelo del Desierto de Atacama. De la autoría de tal geoglifo perturbador no hay certeza, y de su existencia se supo en 2011, cuando una dirigente de la Agrupación de Ejecutados Políticos de Calama recibió un sobre anónimo bajo su puerta con una fotografía satelital que da cuenta de esa porción del espacio.

El corvo es un emblema de las Fuerzas Armadas: fue adoptado por el ejército chileno en la Guerra del Pacífico a fines del siglo XIX, y durante la más reciente dictadura cívico-militar el arma fue empleada para la ejecución de miles de personas en el marco de una política sistemática de exterminio y desaparición.

El dibujo contiene referencias numéricas que parecieran señalar el año del golpe de Estado y del plan “Caravana de la muerte” (11 y 73), como también la fecha de la operación “Retiro de televisores” (78), un plan de desaparición encomendado por Pinochet a los regimientos del país a través de un mensaje encriptado, con el objetivo de remover los cuerpos de miles de ejecutados políticos y lanzarlos hacia lo profundo del mar.

«Ejercicios de aridez» se constituye como un territorio a recorrer alrededor de un enigma, buscando habilitar una experiencia y una deriva alrededor de los sentidos y las implicancias de un corvo que permanece incrustado en la tierra más seca del mundo.