15ª versión

umbral

15ª Bienal de Artes Mediales de Santiago

”Aproximación a Claraboya” de Gordon Matta-Clark en el MNBA

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En 1971, el artista neoyorquino, hijo del pintor chileno Roberto Matta, realizó un corte arquitectónico que atravesó el techo del edificio de Bellas Artes y permitió que la luz del sol rebotara por una serie de espejos introduciéndose hacia el subterráneo del mismo. Cinco décadas después, en el marco de la 15 Bienal titulada «Umbral», se expone una aproximación que se puede conocer hasta fines de marzo de 2022.

En plena remodelación del Museo Nacional de Bellas Artes, bajo un programa liderado por su entonces director Nemesio Antúnez, llegó por primera vez a Chile el arquitecto Gordon Matta-Clark (Nueva York, 1943-1978) con el propósito de encontrarse con su padre, el pintor surrealista Roberto Matta. Si bien no logró cruzarse con él, vio en la dirección de Antúnez la posibilidad de realizar una intervención que tituló como Claraboya (1971), hoy reinterpretada en su espacio original, en el marco de «Umbral», la 15 Bienal de Artes Mediales de Santiago.

De acuerdo a los relatos y registros disponibles, la intervención consistió en un corte vertical desde la cúpula del museo hasta el zócalo que, a través de la instalación de una serie de espejos, permitía el ingreso de la luz natural al interior del edificio, proyectando también las imágenes del cielo sobre las escaleras del subterráneo. Actualmente, y hasta fines de marzo de 2022, la aproximación de este corte arquitectónico consta de la reposición de seis espejos bajo sus dimensiones, soportes y ubicaciones originales; la proyección de fotografías históricas y un video con entrevistas de quienes se han dedicado a investigar su legado artístico. 

Hijo de Roberto Matta y de la pintora estadounidense Anne Clark, Gordon se tituló como arquitecto, sin embargo, su trayectoria la forjó desde la deconstrucción. A comienzos de los 70, realizó una serie de acciones para cuestionar el principio de propiedad y la lógica mercantil del urbanismo, lo que fue un pie inicial para instaurar el concepto de anarquitectura, movimiento con el que buscaba generar reflexiones críticas sobre las reformas urbanas y su impacto en la vida de los habitantes. Empezó a realizar cortes en edificios, abriendo nuevos espacios y perspectivas, a mano, con sierra o cincel, cruzando disciplinas como la escultura, fotografía, performance y video. 

Claraboya, junto a Circus-Caribbean Ocean (Museo de Arte Contemporáneo de Chicago, 1978), es uno de los dos cortes arquitectónicos que Matta-Clark realizó en un espacio museal y el único que se mantiene en pie en el mundo. No obstante, debido a la modernización propia del urbanismo, el edificio sufrió algunas reformas y los espejos fueron removidos con el tiempo, ocultando la obra por más de 50 años. 

Este año, la 15 Bienal de Artes Mediales y el Museo Nacional de Bellas Artes, se propusieron recuperar la obra, en un trabajo conjunto que requirió la investigación de fotografías de la época, publicaciones y catálogos antiguos, y diversas entrevistas a quienes conocieron al artista. “Hemos ido armando el puzzle a través de la recopilación de los distintos relatos, registros y mitos sobre la intervención, que también ha implicado una arqueología sobre los distintos momentos y transformaciones del edificio a largo del tiempo, y en la medida que vamos avanzando siempre van surgiendo nuevas interrogantes”, explica Francisca Coríntez, arquitecta que trabajó en conjunto con Magdalena Vergara, también arquitecta.

“Esta obra representa realmente de qué se trataba el trabajo de Gordon”, explica Jane Crawford, compañera con quien el artista compartió sus últimos años antes de fallecer tempranamente en 1978. “Gran parte de su trabajo trata de llevar la luz a espacios oscuros y la inclusión, por supuesto. El uso de espejos para reflejar la luz, las paredes opuestas y los mismos reflejos, de esta manera, si te parabas en la puerta y mirabas hacia dentro, tu reflejo estaría en un lugar completamente inesperado, o verías un pájaro volando”. 

Actualmente, en el marco de la 15 Bienal, el MNBA se aproxima a Claraboya de Gordon Matta-Clark, situando algunos elementos que estuvieron presentes hace ya cinco décadas, complementándola con algunas de las fotografías de la colección, que probablemente tomaron Gordon y Jeffrey Lew, artista que le acompañó en su travesía al sur. Se ha decidido llamar a esta acción como una aproximación, pues ha sido trabajada a partir de los testimonios de personas que compartieron con Matta-Clark en esa época, y la reconstrucción documental y bibliográfica de su intervención.